domingo, 14 de septiembre de 2014

Tardas

Tardas, justo cuando más te adolezco.
Y no sé si del incauto arregosto
de abril a nuestra dilección de agosto,
yo he sido quien dio el paso gigantesco

o tú quedaste en el juego burlesco.
El espacio entre ambos es tan angosto,
pero sólo para mí tiene un costo:
Tú no eres mía, yo te pertenezco.

Cubre las llagas de tus pies descalzos,
provocadas por recorrer el bardo
en la búsqueda de cariños falsos.

Que iré a ti, paciente como yo aguardo.
Mas no dudes si yendo a pasos balsos,
justo cuando más me adoleces, tardo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si sabes hacer buen uso del lenguaje (sin recurrir a ofensas y/o frases cargadas de negativismo), comenta. Si no, hazlo de todos modos, pero revisa un diccionario para no parecer grotescamente ignorante y poder insultar con propiedad. Gracias por tu comentario y vuelve pronto. Tal vez la próxima vez tenga bocadillos.

P.D. No robes mis frases, porque sé dónde vives.