miércoles, 31 de julio de 2013

Cuestión de tiempo

El amplio umbral de un encuentro infinito
guarda la marcha de un sueño a escondidas,
aquel terraplén de fauces, mordidas, 
que dio a la razón  un lapso fortuito.

Reposo eficaz, sagaz e inaudito,
sopla a la vera de causas perdidas,
inmensurable, pierde las medidas
del dulce efluvio de un tímido mito.

Se distraen a placer las miradas,
es su pueril juego, su pasatiempo
de encontrarse juntas e inesperadas.

Que de verse sin ningún contratiempo,
ya sabrán que ellas estarán situadas
en un mismo punto. Es cuestión de tiempo.

sábado, 13 de julio de 2013

Soneto a canto...

...del tímido deleite en el misterio
de encontrarme sumido en lo imprevisto,
que al mundo he venido desprovisto
del afán de forjarme un plan en serio.

No comprendo de la vida el criterio,
pues mientras más lo pienso, poco existo,
y al dejar de cavilar, más me quisto
con el desasosiego en cautiverio.

La observancia de nuestra contingencia,
sin prevenir lo que siempre seremos,
cumple sin vituperar nuestra esencia.

No busquemos irnos a los extremos,
y si percatamos nuestra presencia,
no indaguemos motivos. Sólo hablemos.

jueves, 11 de julio de 2013

¡Oh, agur!

Un tono mediocre cubre el azur
del célico éter de la despedida,
del acre triunfo de un sentir suicida,
a razón ausente, en aciago tour.

Que fuiste un juego, y yo ávido tahúr
que tiene al amor de afición prohibida,
que aposté mi suerte, aposté mi vida,
y no me queda nada... agur, agur. 

En los típicos y propios asuntos
de la voz que se pierde en el murmurio,
debo aclarar y colocar los puntos.

Porque si el tiempo fue quien dio el augurio,
profetizando siempre vernos juntos,
'querida' mía... cometió perjurio.

viernes, 5 de julio de 2013

Entreluces

No. No puedo encajar tu claroscuro
en un albugíneo lienzo vital,
en el sopor de mi instinto animal
o en mi corazón que rodea un muro.

Pues si de bruno bañase a futuro,
a la falta de lo fundamental,
¿cómo saber que no soy el criminal
que ha pecado de impulsivo en su apuro?

En cada rasgo, de a poco, te encuentro,
entreluces entre luces intensas,
rompiendo mi eje, volviéndote el centro.

Y despojas provecho a mis expensas,
sin saber yo qué es lo que llevas dentro
del tapiz. Yo pienso en ti... ¿y tú? ¿En quién piensas?