jueves, 29 de enero de 2015

A esa injerencia de tu cabello

Esa guedeja que un céfiro mueve
irrumpe aun cuando mi boca te besa.
Es como tú, flemática y traviesa,
que en audaz forma a intervenir se atreve

cuando cuelgo de tu sonrisa leve.
Siendo esa su pigre naturaleza,
va a dar una vuelta y pronto regresa,
para hacer nuestra confluencia más breve.

Sea un cabello o sea una pestaña,
la tregua ha llegado a importarme un bledo
por ser tu fragancia quien le acompaña.

Para ser sincero, yo casi puedo
afirmarte que mi tacto le extraña
tanto que a veces yo mismo le enredo.

martes, 27 de enero de 2015

El naufragio

"Me dirijo a usted, mi lector afable:
por cruel azar ha encallado mi barco
en esta isla que envuelve un fluido zarco,
dejándome en situación lamentable.

Siempre me he pensado un ser adaptable,
pero poco aprieto si mucho abarco.
Así que... ¡sáqueme de este atroz charco!
Digo, si fuera usted asaz amable."

Imaginé que era sólo una broma,
prevista para tomarme por tonto.
Metí el papel dentro de la redoma

y con tal fuerza la devolví al ponto.
Tranquilo, hombre, que cuando el sol se asoma,
si alguien te extraña, ha de buscarte pronto.

miércoles, 21 de enero de 2015

La consulta

Tanto extraño verle a la luz del flexo
que aluzaba desvelos de escritorio. 
Verle andar desnuda en mi dormitorio,
de ella añorando más amor que sexo.

Extraño sus bienvenidas de amplexo,
su pensar y actuar tan contradictorio.
Sentirme entre su eco respiratorio,
de algún problema mundano, inconexo.

¿Por qué todo aquello aún permanece
en donde ni botella ni psiquiatra
pueden tal concordia dar por disuelta?

¿Dígame, doctor, si no le parece
que si es mi corazón quien la idolatra,
debiera al menos ser mi mente absuelta?